Lejos de querer hacer una apología a favor de Diego A. Maradona, esto intenta hechar a luz y dar a conocer de como en Alemania se defenestra la imagen del genio de Fiorito. Genio; ídolo; héroe…; Dios, para los argentinos.
Debo aclarar que no soy un «hincha» acérrimo del fútbol. Me encanta, lo disfruto, pero no soy fanático, es más dejé hace años de ir a la cancha. Soy digamos “hincha de sofá”. Vivo en Alemania desde hace 13 años y he escuchado tantos comentarios negativos sobre “el Diego”, que un día me pregunté: ¿los alemanes, se enteraron alguna vez que Maradona fue, durante su reinado futbolístico, el mejor jugador de fútbol? digo esto porque llegué a tener la impresión de que en Alemania Diego pasó a la historia como un hombre mediático, obeso, adicto a la cocaína y con un gracioso tatuaje del “Che” en uno de sus brazos. En los diarios alemanes, cuando Maradona estaba otra vez delgado y conduciendo un programa de televisión en Buenos Aires, si salía una nota periodística sobre él la foto que acompañaba dicho artículo nos mostraba un Diego gordo y derrotado. Son innumerables las veces que en reuniones; fiestas o en la oficina me recordaron los alemanes que Maradona, argentino él (como si yo no lo supiera) se había drogado alguna vez y que por ello había arruinado su carrera y que lo repudiaban por eso… Al comienzo, lejos de ofenderme, traté de tomar distancia de la polémica que por algún motivo se me hacía ajena. Luego ante la reiteración del mismo comentario y según pasaron los años, empecé a sentir una molestia que no alcanzaba a comprender aún… una sensación de falta de compromiso por mi parte. Poco a poco empecé a tomar cartas en el asunto. Así llegó una vez el día en que a una hermosa alemana, ex compañera de trabajo y luego de dejar sentado su prejuicioso comentario le pregunté si ella se había enterado de que también Maradona había sido jugador de fútbol y que para el resto de mundo había pasado a la historia tal vez como el mejor jugador de todos los tiempos, a lo que me respondió que en Alemania una vez conocido lo del affaire con la cocaína se había muerto. Pues si muerto está en la memoria colectiva de un pueblo, que ahí lo dejen y todos tranquilos, ¿no?…, digo yo. Pero no, Diego siempre va a ser noticia y no sólo en Argentina.
En Alemania, cuando no hay noticias importantes, los periodistas para justificar su sueldo tienen que hechar mano a las notas de color y afilar entonces toda su creatividad. En ese momento aparecen notas de ositos polares recién nacidos y así nos enteramos si estos están deprimidos, si están constreñidos, si se llevan bien con su cuidador, en fin… La nota va debidamente acompañada de dulces fotos por supuesto. En este tren de cosas, vienen las notas sobre Maradona (aquí en Alemania) a llenar vacíos. Aparecen fotos (siempre bien gordito, eso sí) y nos cuentan en qué anda, con quién se pelea y no sé que cosa más. Si no alcanzan los renglones, siempre pueden llenar la nota recordando que el simpático gordito mediático, alguna vez fue campeón del Mundo con la albiceleste.
Las comparaciones son odiosas, pero una leyenda viva acá en Alemania es el Kaiser Franz Beckenbauer, pero los periodistas teutones encontrarán su vida muy aburrida, porque de él diría que no escriben ni la mitad de lo que sobre nuestro Diego.
Para nosotros, los argentinos, Diego fue un héroe y le perdonamos la “mano de Dios” y el “positivo” del control antidoping durante el mundial ’94 en EE.UU.
Lo de la cocaína, entendemos que nunca fue su pócima mágica para llevar el “fulbo” atada a su exquisita izquierda. A Diego lo queremos como es y no le pedimos más. Ya nos dio mucha alegría.
Gracias Diego por la pasión, por los goles, por esa zurda fantástica!
Y gracias por no ser hipócrita… eso para mí es una virtud y vos en eso sos un ejemplo.
“… para el pueblo lo mejor, Diego Armando Maradooo…”